Apnea del sueño
Durante el sueño, los músculos encargados de mantener permeable la vía respiratoria sufren una relajación y el paso del aire a nivel de la faringe se ve dificultado. Como consecuencia, los tejidos blandos vibran produciendo el ronquido.
El ronquido y la apnea del sueño
Aquí algunas claves de estos trastornos.
¿Cómo se tratan estos trastornos?
Se trata de forma pluridepartamental. Para tratar estos temas, nuestro centro cuenta con un grupo de profesionales odontólogos y cirujanos maxilofaciales que tienen relación externa con otras profesiones, como neurólogos y neurofisiólogos. De esta forma, el diagnóstico del tratamiento a realizar es el mejor de los posibles para tratar la enfermedad del sueño, de la cual hay hasta 80 variantes que hay que saber identificar y diagnosticar correctamente, para tratar o derivar a centros especiales.
Deficiencia de oxígeno
En muchas ocasiones, una falta de flujo de aire produce caída de los niveles de oxígeno en la sangre. El cerebro se ve alertado por este descenso, produciéndose numerosas interrupciones del sueño durante toda la noche. Esta deficiencia de oxígeno genera una serie de síntomas como la hipersomnolencia, el cansancio generalizado, la depresión etc. A nivel general, incluso, aumenta el riesgo de padecer determinadas enfermedades como: hipertensión, infarto, tromboembolismo, diabetes tipo II, etc.
¿Cómo me afecta?
La hipersomnolencia, la pérdida de memoria, y las alteraciones en el estado de ánimo afectan a la vida personal, laboral y social del enfermo, sin olvidar el riesgo de padecer un accidente laboral o de tráfico al ser mas probable el quedarse dormido mientras se conduce un vehículo. La importancia de los trastornos del sueño es tal, que afecta al 68% de la población española, y por igual a hombres y a mujeres, aunque en las mujeres dichos trastornos aparecen más tarde.
Diagnóstico
El diagnóstico se realiza mediante la historia clínica, radiografías, fotos, y principalmente con un aparato llamado Apnealink, que el paciente tiene que llevar toda una noche, en su casa. Nosotros le proporcionamos el dispositivo y al día siguiente descargamos la información en un programa informático especializado que determina las apneas, las hipoapneas, ronquidos, oxígeno y pulso del paciente. Con toda esta información sabemos si el problema es leve, moderado, grave o muy grave.
CPAC
Para los casos graves, muy graves o moderados fuertes el tratamiento son las CPAC, aparatos con un compresor que mediante una mascarilla que se coloca en la nariz y en la boca inserta aire a presión. Para colocarla hay que hacer una poligrafía respiratoria nocturna que se realiza en un hospital.
Cirugía maxilofacial
Hay ocasiones en que las apneas son provocadas por problemas anatómicos, para lo cual hay que valorar cirugía maxilofacial de adelanto mandibular, extirpación del tejido blando del paladar, etc. Estas cirugías serán tratadas por nuestros cirujanos maxilofaciales que trabajan en el Instituto Marbán.
Prótesis
En los casos leves o moderados el tratamiento consiste en colocar una prótesis de avance maxilar para dormir, que abre las vías aéreas y mejora tanto las apneas como los ronquidos. También son aconsejables en pacientes graves si estos van a viajar. Las prótesis no tienen nada que ver con las que venden prefabricadas, ya que en estas el ajuste no es real, además de no realizar una serie de funciones vitales como movimientos de lateralidad, de protrusión, ser individualizadas y fabricadas con materiales biocompatibles.
Vivir más y mejor
Un estudio concluye que las apneas provocan diabetes Tipo II ya que alteran el metabolismo glucosa dando cierta intolerancia a la insulina, siendo este un factor más para tratar los trastornos del sueño, que además dan muchos problemas coronarios. Una apnea tratada es vivir más y mejor. Si no se la trata, la calidad de vida es peor.